500 g de crema de leche.
150 g de frutillas frescas y licuadas.
100 g de azúcar cristal.
10 g de gelatina sin sabor.
50 cc de agua (p/ hidratar la gelatina).
Vainillas, cantidad necesaria.
Crema chantilly, cantidad necesaria.
Frutillas frescas, cantidad necesaria.
Hidratar la gelatina en el agua, dejar reposar por 3 minutos. Luego, llevar al microondas por 30 segundos.
Licuar el azúcar junto con la crema de leche y las frutillas por 1 minuto. Poner la mezcla en la batidora.
Agregar la gelatina disuelta, batir hasta espesar (no debe llegar a punto de crema).
Verter la mezcla en un molde desmontable sobre una base hecha con las vainillas, y llevar a la heladera por 8 horas para se solidifique bien.
Desmoldar, decorar con crema chantilly, vainillas y frutillas frescas; mantener en la heladera hasta el momento de servir.